El Primer Día de Trump: El Diario de un Facho

El Primer Día de Trump: El Diario de un Facho

No hace falta ser brujo ni tener una bola de cristal para predecir el comportamiento del mandatario más "hazme reír" del mundo: Donald Trump. Apenas unas horas después de asumir el cargo, Trump no perdió tiempo en demostrar su autoritarismo, firmando decenas de órdenes ejecutivas que dejaron en claro su intención de dividir aún más al país.

Una de las acciones más escandalosas fue la decisión de perdonar, conmutar sentencias o prometer desestimar los casos de más de 1,500 personas acusadas por los disturbios del 6 de enero de 2021 en el Capitolio. Entre los beneficiados se encuentran individuos condenados por agredir a oficiales de policía, romper ventanas y profanar el Capitolio. Con un simple "plumazo", Trump borró de un golpe la investigación más grande en la historia del Departamento de Justicia, exonerando de facto el ataque más grave contra la democracia estadounidense en tiempos modernos.

No contento con eso, también ordenó la desestimación de unos 450 casos pendientes en los tribunales, echando por tierra años de trabajo legal en la investigación federal más extensa jamás realizada.

Trump no dudó en calificar a los insurrectos como "patriotas" y "rehenes", presentando los procesos judiciales en su contra como una injusticia. Ignorando la violencia y el caos que provocaron, Trump se posicionó como la víctima de un sistema que, según él, lo persigue políticamente. Declaró que sus acciones pondrían fin a "una grave injusticia nacional" y marcarían el inicio de "una reconciliación nacional", aunque dicha reconciliación parece estar reservada para quienes atacaron las puertas de la democracia.

Un discurso inaugural cargado de odio y xenofobia

En su discurso inaugural, Trump no perdió la oportunidad de azuzar a sus seguidores, declarando una emergencia nacional en la frontera sur y prometiendo el despliegue de tropas para detener a los inmigrantes. "Voy a declarar una emergencia nacional en nuestra frontera sur", anunció con tono triunfal. Poco después, publicó un decreto declarando: "Toda entrada ilegal será detenida inmediatamente, y comenzaremos el proceso de regresar a millones y millones de extranjeros ilegales a los lugares de donde vinieron".

Trump etiqueta a cárteles como terroristas y amenaza a México

El presidente también firmó una orden ejecutiva para clasificar a los cárteles mexicanos, al grupo criminal Tren de Aragua y a la pandilla MS-13 como organizaciones terroristas, lo que los convierte en posibles blancos de ataques militares. "México probablemente no quiere esto", declaró Trump desde el Despacho Oval tras firmar el decreto. Cuando se le preguntó si esta decisión implicaría ataques en territorio mexicano, respondió de manera ambigua: "Podría pasar; han pasado cosas más extrañas".

Esta postura fue inmediatamente rechazada por el presidente del Senado de México, Gerardo Fernández Noroña, quien advirtió que tal decisión es peligrosa y abre la puerta a justificaciones para intervenciones militares en otros países. "No lo vamos a aceptar de ninguna manera", afirmó contundentemente. Según Noroña, Estados Unidos debería empezar por solucionar el problema del narcotráfico en su propio territorio, donde la distribución de drogas ocurre sin mayores obstáculos.

La presidenta de México, la doctora Claudia Sheibaum, también condenó los avances bélicos de Trump, subrayando que "México no es colonia de nadie, ni protectorado de nadie. Es un país soberano".

Golpe a los derechos de inmigrantes: CBP ONE y la Enmienda 14

En otro ataque contra los derechos de los inmigrantes, Trump firmó un decreto para eliminar el uso de la aplicación CBP ONE, que permitía a los solicitantes de asilo registrarse en la frontera de manera ordenada. Además, emitió una orden para reinterpretar la Enmienda 14 y negar el derecho a la ciudadanía a los hijos de inmigrantes indocumentados nacidos en Estados Unidos.

Aunque la medida solo aplicaría a nacimientos futuros, su implementación práctica impediría que el Departamento de Estado emitiera pasaportes a los niños nacidos de padres indocumentados. Asimismo, la Administración de la Seguridad Social dejaría de reconocerlos como ciudadanos, dificultando su acceso a derechos básicos y limitando sus oportunidades laborales.

Las cicatrices de un autoritario

Las acciones de Trump, el hombre más autoritario que ha ocupado la Casa Blanca, no reflejan en absoluto la "grandeza" de Estados Unidos. En lugar de ello, dejan heridas profundas entre los inmigrantes y envenenan las relaciones con sus vecinos en "Yankeelandia". Lejos de construir puentes, Trump sigue cavando trincheras, y los más vulnerables son quienes pagan el precio.

El audio en Sound Cloud: https://soundcloud.com/el-chupacabras-1/sets/el-primer-dia-de-trump-el-diario-de-un-facho?si=d8e2bc862c954b44ac1715f85f86ce08&utm_source=clipboard&utm_medium=text&utm_campaign=social_sharing